La Cuenta de Resultados puede mostrarles a los empresarios cuál es el margen que obtienen realmente y cuál es el punto de equilibrio de su negocio. Puede darles valiosas pistas para entender cómo mejorar sus beneficios, dónde ganan más y dónde menos, o por qué hay clientes o productos con los que pierden dinero. El libro trata de reivindicar la Cuenta de Resultados, la cuenta de pérdidas y ganancias, expresada de forma marginal, como un inmejorable instrumento de gestión, cuando está bien presentada y responde a una lógica de negocio. La Cuenta de Resultados es un arma decisiva, si se sabe utilizarla. El libro es una invitación a usarla, y a usarla bien. Incluye los datos resumidos de los márgenes de beneficio obtenidos por las empresas más conocidas de diversos sectores.
Este libro pretende reivindicar la Cuenta de Resultados (CR) como el más potente instrumento de gestión que el empresario tiene a su alcance, y reclamar una mayor atención y cuidado en su uso. La causa de dicha reivindicación es que este autor estima que ni en las pymes ni incluso en las grandes empresas se le da a la CR la importancia que se merece, ni el tratamiento adecuado. En suma: no se le saca partido. En muchas pymes ni siquiera se obtiene, de hecho, una Cuenta de Resultados como mandan los cánones. Es decir, sus Cuentas de Resultados ni tienen el formato adecuado ni se preparan y presentan a los directivos con la frecuencia debida. En las grandes empresas sí que se suelen obtener las Cuentas de Resultados con la frecuencia y formato adecuados, pero a veces se las relega a un papel demasiado secundario, priorizando instrumentos más sofisticados, como el Cuadro de Mando Integral, repletos de indicadores estratégicos de todo tipo que sin duda son correctos y adecuados pero entre los que a menudo se olvidan, o se dejan en segundo término, los simples y directos indicadores del resultado que encontramos en toda CR bien hecha. En definitiva, muchas empresas no utilizan la CR como una herramienta de gestión, a pesar de que es el instrumento más sencillo y barato que tienen los empresarios a su alcance, como este libro tratará de demostrar. A veces creo que incluso parece quedar en el olvido que el beneficio es el fin principal de toda empresa, y que precisamente la CR es el estado contable donde primero debemos buscar los factores que lo determinan. La Cuenta de Resultados dice mucho más de una empresa de lo que se puede pensar a primera vista. Pero hay que hacerla bien, y presentarla y analizarla con el debido detalle. Sobre todo, explica lo más importante: si la empresa gana o pierde dinero, y da indicios de cuáles son las razones de por qué lo gana o lo pierde. Sólo conociendo las razones, las causas del beneficio o la pérdida, podemos ponernos a gestionar la empresa con eficacia. Ya se empieza mal cuando ocurre a menudo que no es posible sacar información realmente relevante de la maraña de números y cuentas con que se presenta la Cuenta de Pérdidas y Ganancias en la contabilidad tradicional. En consecuencia, muchos empresarios, a pesar de llevar una contabilidad más o menos correcta, no saben a ciencia cierta cuánto ganan, ni cómo o dónde lo ganan, y ni mucho menos por qué lo ganan, o lo que es peor, si pierden, por qué pierden. La contabilidad clásica generalista no ayuda a la gestión. Es un instrumento legalista, orientado a la liquidación de impuestos, y generalmente visto por los empresarios como un mal necesario. La Cuenta de Pérdidas y Ganancias que se utiliza habitualmente en las empresas se limita a mostrar si los ingresos son mayores que los gastos, y por tanto hay beneficios; o si los gastos son mayores que los ingresos, y en consecuencia, hay pérdidas. Apenas como mucho discrimina entre resultado de explotación y resultado financiero, entre resultado ordinario y extraordinario, pero no dice casi nada que le permita al empresario descubrir ámbitos de mejora de las operaciones o la estructura del negocio sobre los que tomar decisiones concretas. El empresario necesita ir más allá de lo que supone saber sólo si gana o pierde. Necesita poder encontrar respuesta a preguntas como: - ¿Dónde se producen mis beneficios, o las pérdidas? - ¿En qué productos, en qué mercados.? - ¿El coste de la estructura de la empresa es correcto o excesivo? - ¿Los beneficios que obtengo son los que le corresponden al nivel de Ventas que ha alcanzado la compañía? - ¿O están por debajo de lo normal? - ¿Son mis resultados comparables con los de mis competidores, o los de otras empresas del mismo sector? - Si hay pérdidas donde antes había beneficios, ¿a qué es debido? - Si los beneficios han disminuido mucho, o han aumentado anormalmente, ¿por qué ha sido? - En definitiva, ¿dónde debo incidir para mejorar mis resultados? El primer y principal objetivo que persigue este libro es realizar una reflexión sobre el modo en que debe presentarse la Cuenta de Resultados para que sea un instrumento efectivo de gestión. Pero también busca ir más allá de la correcta presentación de la Cuenta de Resultados. Pretende indagar en las causas del resultado y reivindicar la conveniencia de investigar aquellos factores que realmente explican que un negocio obtenga beneficios o pérdidas. Todo negocio responde a unas pautas, a dos o tres elementos clave que explican que vaya bien o mal. Es obligación de todo empresario conocer y controlar dichos factores clave del resultado. Y cada negocio tiene sus propios factores. Por ejemplo, en una distribuidora de libros, son dos, el factor descuento y el factor devolución. Dedicaremos un capítulo a profundizar en los elementos clave en algunos sectores, pero el lector habrá de pensar en los del sector que le interese. En definitiva, conocer la Cuenta de Resultados y los factores que la rigen, para controlarlos y gestionarlos adecuadamente, es un aspecto esencial del éxito de cualquier empresa. No basta con decir que la dirección procura que la empresa obtenga un beneficio del 10% de las Ventas, ya que ese dato en sí no dice nada. Tampoco basta con decir que se está controlando el crecimiento de los Costes de Estructura, o que éstos están creciendo poco, o mucho. Hay que ir más al fondo de la CR. Hay que diseccionar la Cuenta de Resultados, si se quiere conocerla bien, para poder gestionarla con éxito. Diseccionar la CR para poder gestionarla, esa es la clave. Y para poder diseccionarla hay que diseñarla, plantearla, de forma acertada. Acorde con las características estratégicas del negocio y del esquema de organización alineado con el mismo. Es obvio que si se quiere que una empresa mejore, hay que gestionarla. Las empresas no mejoran solas. Y gestionar una empresa quiere decir medir y actuar sobre sus resultados. Y la guía de cómo actuar sobre sus resultados está en su CR. El beneficio general de una empresa es la consecuencia de múltiples resultados parciales, que también hay que bajar a medir y gestionar, en la medida de lo posible: - qué ganamos con cada producto - qué ganamos con cada cliente - qué ganamos en cada región, etc. ¡Cuando se quiere mejorar cualquier área de una empresa, la solución es ponerle una Cuenta de Resultados! Sólo lo que se mide mejora. Este libro defiende, en síntesis, que para que la Cuenta de Resultados sea útil y se aproveche como el poderoso instrumento de gestión que es, hay que trabajar al menos en cinco direcciones: 1. Expresarla en forma marginal Es decir, separando los costes fijos o de estructura de los variables o directos, calculando el Margen Bruto de explotación, al restar a los ingresos obtenidos por los productos o servicios producidos por la empresa los Costes Directos incurridos para producirlos. El concepto de Margen Bruto es esencial para entender si la empresa está obteniendo el resultado adecuado al primer nivel del negocio. El Margen Bruto (MB), expresado en forma porcentual, al ponerlo en relación con la cifra de Ingresos, explica lo bueno que es un negocio. El MB puede ser mayor o menor, pero no debe ser nulo o negativo, al menos de forma global o generalizada, porque no tendría sentido. Una empresa que vende con MB negativo no tiene razón de ser. Además del MB, se debe analizar el beneficio desglosándolo, en cascada, en otros tres conceptos distintos de beneficio: - Beneficio de Explotación - Beneficio antes de Impuestos - Beneficio Neto Cada uno de ellos expresa una faceta del beneficio de la empresa, y se calculan del modo siguiente: Ventas - Costes Directos = Margen Bruto - Costes de Estructura = Beneficio de Explotación - Costes financieros +/- Ingresos y Costes Extraordinarios = Beneficio antes de Impuestos - Impuestos = Beneficio Neto Este libro se centra prioritariamente en la CR hasta el cálculo del Beneficio de Explotación. En ese contexto, el libro ayudará al lector a reflexionar sobre qué costes se deben considerar directos, y por tanto deducirse del Margen Bruto, y cuáles deben ser considerados de Estructura. 2. Analizar el Margen Bruto en cada línea de negocio Todo empresario debe conocer y gestionar el Margen Bruto, y sobre todo el % que representa el Margen Bruto sobre la cifra de Ventas. Tanto de su empresa globalmente como de cada uno de los negocios que abarque su empresa. El % de Margen Bruto es, probablemente, el segundo indicador de gestión en importancia que debe seguir y gestionar un empresario, siendo el primero la evolución de las Ventas. Pero no basta con el Margen Bruto y el % de MB global de la empresa, hay que pasar de la cifra global de Margen Bruto a un desglose de la misma para cada una de las áreas de negocio. Los MB de cada negocio, una vez sumados, determinan el Margen Bruto global. El % de MB difiere, lógicamente, en cada área de negocio. Puede haber áreas con un 50%, otras con un 15% e incluso otras con -8%, por ejemplo. El % de MB global es el resultado de la integración de todos ellos. Controlar la evolución del % de MB, tanto a nivel global como de cada área de negocio, es una tarea vital de todo empresario. 3. Gestionar el Coste de Estructura, y ponerlo en relación con el Margen Bruto El Beneficio de Explotación es el resultado de restar los Costes de Estructura del Margen Bruto. El empresario, por tanto, ha de vigilar que su Estructura no tenga un coste superior al Margen Bruto que generen sus negocios. Como veremos más adelante, una estructura no es costosa o pesada en sí misma, sino en la medida que no esté equilibrada es relación al beneficio que genera el negocio o los negocios a los que da soporte. Una estructura de 1.000.000 anuales es excesiva para una empresa que genera un Margen Bruto anual de 700.000, pero es correcta para otra que genera 1.500.000. 4. Entender y gestionar el paso del Beneficio de Explotación al Beneficio Neto final después de Impuestos El beneficio después de restarle a las Ventas los Costes Directos y los Costes de Estructura, es lo que se conoce por Beneficio de Explotación. Dicho beneficio es el que más se aproxima al beneficio puro y recurrente del negocio, sin influencia ni de las provisiones o los resultados extraordinarios que se den en un ejercicio, ni de la estructura de capital que tenga la empresa (es decir, la relación entre los recursos propios y la deuda financiera), que implica cargar con unos mayores o menores intereses; ni, por supuesto, de los costes fiscales que supongan los impuestos que se hayan de pagar sobre los beneficios. Se entiende por Beneficio Neto el resultado del Beneficio de Explotación más o menos la influencia de esos factores externos a las operaciones normales que acabamos de mencionar: - Costes financieros, según se recurra más o menos al endeudamiento. - Provisiones y extraordinarios, debidos a circunstancias más o menos ajenas al devenir normal del negocio. - Impuestos sobre los beneficios, sujetos a la normativa fiscal aplicable, y que dependende que se haga una buena gestión fiscal de la empresa. 5. Determinar y gestionar los factores intrínsecos a cada negocio que configuran el resultado Factores como la productividad de la estructura, el margen aplicado en la fijación de precios, los descuentos o las devoluciones, son factores a considerar a la hora de entender y seguir una cuenta de resultados. Aparte de una serie de factores genéricos que se repiten habitualmente en la mayoría de negocios, cada negocio en particular tiene sus propios factores, incluso con su propia terminología, que explican la alquimia de la obtención de resultados. En este libro tratamos de investigar cuáles son esos factores en general, y también en particular en una serie de negocios, y de dar las pautas para que el lector los busque en su propia empresa, o en el negocio que le interese. *** Se pretende, en suma, profundizar en la Cuenta de Resultados. En cómo presentarla con claridad, de manera que sea un instrumento útil en el proceso de toma de decisiones; y en cómo descubrir los elementos que la rigen en general, y en cada negocio concreto. *** Aunque el enfoque global del libro creo que es aplicable a cualquier empresa, de cualquier tamaño y de cualquier sector, los ejemplos que se usarán y los detalles que se manejarán son en general de aplicación a empresas de servicios, industriales o comerciales, pero no lo son a empresas financieras, como bancos o compañías de seguros. Las empresas financieras compran y venden dinero, o seguros de riesgos asociados a posibles pérdidas económicas, y las características de sus cuentas de resultados, en consecuencia, son específicas de esos negocios, y requerirían una obra especializada que el lector que esté interesado seguro que encontrará en cualquiera de los buscadores bibliográficos. Este libro está orientado, por tanto, a empresarios y directivos, y a todo aquel que desee gestionar los resultados de una empresa no financiera de cualquier tamaño, aunque sus conclusiones pretenden ser útiles sobre todo a las empresas pequeñas y medianas. Espero que disfrute con su lectura, y que obtenga ideas que le parezcan aprovechables y aplicables de inmediato. Desde aquí me pongo a disposición del lector para compartir sus reflexiones y sus críticas, o tratar de resolver sus dudas, en mi correo electrónico pacolopez@pacolopez.biz, y en mi blog www.pacolopez.biz, en el que procuraré ir manteniendo actualizadas mis ideas sobre el tema de esta obra, así como los datos de las CR de las empresas que se citan al final del libro en el anexo IV.
"Paco ha conseguido sintetizar en este libro una guía para la gestión de la cuenta de resultados, que será de gran utilidad para cualquier empresa." Jaime Hortelano
"El autor analiza y desarrolla con habilidad un instrumento al que a veces no le dedican los empresarios la atención que debieran: la Cuenta de resultados." Lorenzo Molina
Francisco (Paco), es licenciado en Ciencias Empresariales y MBA por ESADE, y licenciado en Derecho por la Universidad de Barcelona. Ejerce como consultor y abogado. Es experto en organización, estrategia y en asesorar en procesos complejos de transformación empresarial, en especial en empresas familiares. Como consultor ha trabajado para multitud de empresas de casi todos los sectores, tanto en España como en el extranjero. Hasta 2003 fue socio de Arthur Andersen, la extinta firma de auditoria y consultoría. En 1989 se incorporó a Andersen al absorber ésta la firma de consultoría y sistemas que Paco había fundado en 1982 (CMC). Actualmente, aparte del ejercicio como profesional independiente, preside FraLucca, la firma de servicios de administración para empresas que fundó en 2003, y es consejero de diversas sociedades en las que participa como accionista.