Este libro es una guía para emprendedores noveles. Aquí te contamos todo lo que necesitas saber antes de empezar un proyecto y, además, te facilitamos las herramientas para que descubras tu madera de emprendedor. Este libro está escrito en un tono directo y divertido, para hacerte más llevadero el camino, aunque sin faltar a la rigurosidad. Queremos resolver tus dudas y miedos, así como los de la gente que está a tu alrededor. Por eso hemos querido contarte los principales mitos que te pueden afectar. También hemos descrito una serie de perfiles de emprendedor, y un test para que identifiques qué tipo de emprendedor eres. Conocerás tus puntos fuertes y puntos débiles, descubrirás con quién debes asociarte y con quién no. Conocerás a MacGyver y Son Goku en su faceta de emprendedores y qué tienen que ver el uno con el otro, así como otros personajes. Estos perfiles son caricaturas de la realidad que nos permiten llegar de un modo distendido, y con un vocabulario muy divulgativo, a un tema tan delicado como la creación de empresas. Finalmente, relatamos diez casos muy reales de emprendedores que han cometido algunos de los errores más frecuentes en el emprendimiento y las lecciones que debemos sacar de cada uno.
Empecemos el viaje... Caminante, son tus huellas el camino y nada más; Caminante, no hay camino, se hace camino al andar. Al andar se hace el camino, y al volver la vista atrás se ve la senda que nunca se ha de volver a pisar. Caminante no hay camino sino estelas en la mar. Todo pasa y todo queda, pero lo nuestro es pasar, pasar haciendo caminos, caminos sobre la mar. Cuatro cosas tiene el hombre que no sirven en la mar: ancla, gobernalle, remos, y miedo de naufragar. Antonio Machado Hemos querido elegir este poema para empezar porque de todos los paralelismos que se han establecido en el mundo del emprendimiento, el que más nos gusta es el que compara la creación de una empresa con el inicio de un camino o el correr una carrera, especialmente si se trata de un maratón. Creemos que es con el que se establecen más coincidencias, tanto por las fases que se atraviesan preparación, arranque, trayecto y llegada, como los estados anímicos que hay que afrontar. Y es que algunos de los factores clave con los que se enfrenta el emprendedor cuando pretende iniciar un proyecto o crear una empresa son el aspecto psicológico y su entorno más próximo. Al igual que en un maratón, querer llevar a cabo una idea de negocio hace que el emprendedor atraviese varias y controvertidas fases y estados anímicos, que en no pocas ocasiones acaban por hacerle desistir de llevar adelante esa simple fantasía que tuvo en un momento de inspiración de lo más inesperado es decir, que la ilusión de prepararse se desvanezca y desista finalmente de correr el maratón o emprender. Miedos, inseguridades o el sentimiento de soledad con los que se encuentra a menudo, se han de saber administrar y superar con ingentes dosis de confianza en el proyecto y en uno mismo. Desgraciadamente, la confianza no será suficiente. Habrá que añadir esfuerzo, sacrificio, constancia, trabajo y las ganas y la ilusión necesarias para alcanzar el éxito. Igualmente, de manera indisoluble, serán necesarios sólidos conocimientos en el sector y el mercado con el que se encontrará conocer el terreno y el recorrido. Solo de esta manera el emprendedor podrá materializar lo que en un primer momento fue un simple pensamiento o una detección de una necesidad la preparación y el pistoletazo de salida. Ahora bien, os tenemos que confesar que este no es un libro de psicología y, por tanto, el aspecto psicológico no lo trataremos en profundidad. Creemos que sería muy osado por nuestra parte dada la formación que tenemos en economía y empresa, pero no en psicología ni coaching. Intentarlo es el primer paso hacia el fracaso... ¡y también hacia el éxito! Sea como fuere, hemos querido escribir este libro con un tono cómico y distendido, y a la vez riguroso, para que toda persona emprendedora pierda los miedos y afronte sin complejos y con confianza los obstáculos que seguramente encontrará. También queremos dejar muy claro que no queremos alentar a nadie porque sí, sino que lo hacemos con la certeza de que dedicando tiempo y esfuerzo, y poniendo empeño y ganas, es muy probable alcanzar el éxito. Al menos el éxito en el ámbito personal, que no es poco. Pero por encima de todo, lo que perseguimos es minimizar el riesgo con tal de evitar el fracaso de cualquier proyecto. También nos gustaría, aunque pueda parecer muy pretencioso, cambiar la concepción de lo que nuestra sociedad entiende por fracaso. A menudo se asimila el fracaso a una cuenta de resultados negativa durante varios años, que acaba por llevar el emprendedor a cerrar la empresa. Creemos que entender un proyecto o una idea empresarial de esta manera, tan simplificada y resumida, es ridículo e injusto; sobre todo cuando los que juzgan el proyecto son terceras personas que no han participado ni conocen la situación particular del emprendedor. En la mayoría de los países anglosajones, con Estados Unidos como principal abanderado de esta filosofía, un emprendedor que ha intentado introducir un nuevo producto o servicio y finalmente no se ha salido con la suya, goza de un cierto prestigio social y reconocimiento. Muy diferente es lo que sucede en nuestra sociedad, que siente mucha más aversión al riesgo en este sentido conservadora, paradójicamente, que trata al emprendedor como un iluminado que no aporta ni oficio ni beneficio a la sociedad. Si el emprendedor sale adelante, especialmente a nivel económico, será conocido como un triunfador; en caso contrario, se le llamará fracasado. Parece que no seamos conscientes de que todo el que trabaja es gracias a que algún emprendedor en algún momento creyó en él mismo y decidió crear su propia empresa. ¡Incluso en el caso de la administración pública! Creemos que una aproximación muy acertada de lo que podría ser el fracaso es o debería ser aquello que se ha realizado sin dedicar todos los esfuerzos, preparación y dedicación. Por ejemplo, en el caso de un equipo de fútbol, trabajo y esfuerzo se dirigen tanto a la propia preparación del equipo en el apartado físico, técnico y táctico el equipo promotor, como al estudio del rival es decir, la competencia, la búsqueda de los mejores jugadores es decir, los recursos humanos, y el análisis y estudio del mercado. Así pues, se podría entender el fracaso cuando el emprendedor o el club de fútbol no haya dedicado todos sus esfuerzos en el desempeño de ganar el partido o conseguir el objetivo a final de temporada. De esta manera, se dejaría de incluir dentro del concepto de fracaso todos aquellos proyectos en los que el emprendedor se haya dedicado con cuerpo y alma, pese a no haber obtenido los resultados esperados. En resumen, el éxito o fracaso de un proyecto creemos que pasa por la consecución de unos objetivos prefijados subjetivos de cada emprendedor según un grado de esfuerzo y dedicación. Como en el deporte, en el emprendimiento, lo importante es participar. ¡Si piensas que estás vencido, vencido estás! Como decíamos antes, debemos tener en mente que más allá de fijar nuestros propios objetivos, nuestro entorno más próximo también puede condicionar el éxito o el fracaso de nuestro proyecto. No son pocos los proyectos abandonados porque la pareja, los padres o un amigo han aconsejado al emprendedor que desistiese de llevarlo a cabo. Sus argumentos siempre son «no te líes», «hay mucha competencia», «ahora no es el momento» o «no te veo capaz»... Eso nos hace venir a la mente la fantasiosa y a la vez reveladora fábula del niño que se sorprende cuando ve un elefante adulto en el circo, atado a una estaca por una simple cadenita, tal y como explica Jorge Bucay en su libro Déjame que te cuente. El niño se preguntaba todo extrañado cómo podía ser que un elefante adulto, de unas cuantas toneladas de peso, ni siquiera intentase desligarse de la pequeña cadena. La respuesta del padre del niño era que ya de muy pequeño lo estuvo intentando durante mucho tiempo, hasta que decidió desistir de la idea porque no se veía capaz. ¡Maldito el día en que decidió no seguir intentando desatarse! Sin saberlo, aquel fatídico día lo había condenado de por vida, pues era lo que hoy le mantenía atado. Así pues, aun con el entorno en contra, tiene que ser la firme decisión de uno mismo lo que debe determinar si quiere seguir siendo el elefante de circo atado a la cadena, o por el contrario, prefiere romperla, emprender su propio camino y descubrir mundo. Una de las figuras clave de este entorno lo suelen simbolizar los padres. Los padres son personas muy influyentes en los emprendedores y, para muchos de ellos, un referente. Así que, muchas veces, la opinión de los padres puede hacer que un proyecto vea o no la luz. Un ejemplo muy claro de esto que intentamos explicar lo podéis ver en la magnífica película del director Gabriele Muccino y protagonizada por Will Smith y su hijo Jaden, En busca de la felicidad. Si aún no la habéis visto, os recomendamos que lo hagáis o, como mínimo, busquéis este fragmento en internet. En la película hay una escena excelente en la que los protagonistas están jugando a baloncesto. El padre le dice al hijo que no lo quiere ver todo el día jugando al baloncesto en la calle, ya que no cree que vaya a llegar muy lejos así. El hijo, de golpe, tira el balón contra el suelo, con gesto de no querer seguir jugando. Después de un silencio, el padre reflexiona sobre lo que su hijo le ha dicho y cambia de parecer: «Eh, escúchame... nunca dejes que nadie te diga que no puedes hacer algo. Incluso yo. Si tienes un sueño, debes protegerlo. Si alguien no puede hacer algo por él mismo, te dirá que tú tampoco puedes. Pero si tú realmente lo deseas, ve a por ello.». A quién va dirigido este libro y qué vas a encontrar en él Este libro va dirigido a todas aquellas personas que de una forma u otra se sienten capaces, o, como mínimo, creen serlo. En cierto modo, este libro pretende contrarrestar todos aquellos comentarios que se suelen escuchar en el entorno de uno mismo, que a menudo acaban por minar la moral del emprendedor y por hacerle abandonar un proyecto en un cajón. Siguiendo el símil del maratón, este libro pretende ser un punto de avituallamiento durante el recorrido (lo hayas empezado o no). Por ello, el primero de los capítulos hemos querido que fuera Desmontando mitos..., porque cuando escuchéis a la pareja, a los padres o a alguien muy cercano deciros las típicas frases recurrentes como «mejor que te busques un trabajo seguro», o «eso seguro que ya está inventado», tengáis algunas armas con las que responderles. Hemos querido dedicar la segunda parte del libro a que conozcas un poco más tu perfil emprendedor. En algunos casos, es posible que te veas reflejado en uno de los perfiles que proponemos. En otros, seguramente te identificarás con varias cualidades y defectos de los distintos perfiles que hemos descrito. Da igual. Lo que es imprescindible es que, antes de comenzar la carrera, sepas cuáles son tus cualidades y aptitudes para aprovecharlas, y también cuál podría ser tu talón de Aquiles, para tratar de reducir tu vulnerabilidad, o como mínimo protegerla. Y por último, en la tercera parte del libro encontrarás varias historias de emprendedores que han cometido algunos de los errores más frecuentes, que puedes tomar como consejos útiles para reducir a la mínima expresión este riesgo de caer a media carrera. Ahora bien, ya te advertimos, que pese a seguir a rajatabla todos los consejos que encontrarás, estos son condición necesaria pero nunca suficiente para garantizar el éxito. O, lo que es lo mismo, llegar hasta la meta. Como dice el dicho: «por este mundo donde caminas no hay ninguna rosa sin espinas». No hace falta que sigas leyendo si pensabas que en este libro encontrarías las claves mágicas de tu proyecto. Lo que sí podemos garantizar es que, leyéndolo, probablemente te ahorrarás buena parte de los obstáculos y errores que han cometido muchos otros emprendedores, que han creado su negocio previamente. Que no es poco. Y como tampoco se trata de avisar solo de los peligros que te vas a encontrar por el camino, también podrás leer algunos casos de acierto, a modo de orientaciones a seguir. Creemos que estos podrán servirte de ayuda, sino en el corto, como mínimo en el medio o el largo plazo, para poder tomar algunos atajos que te ahorren tiempo y, sobre todo, para evitar perderte por el camino. Y para acabar esta introducción, queremos añadir que este libro se ha escrito en un lenguaje muy divulgativo, porque pensamos que no hace falta ser doctor en economía para emprender una nueva actividad. Así pues, no se han utilizado conceptos puramente económicos que no puedan ser entendidos por cualquier persona poco familiarizada con el vocabulario de la empresa o la economía. Precisamente por eso, para hacerte el camino un poco más llano y llevadero... También nos gustaría añadir, a modo de agradecimiento, que este libro está hecho por y para emprendedores, principales protagonistas de los relatos y las historias que en él se describen y que, más allá de la teoría, son los que aportan con sus vivencias y experiencias, y en el fondo, su sentimiento emprendedor, la experiencia y el conocimiento a los que nos dedicamos a este sector. Su valor y su coraje son los que de una forma u otra han contribuido a que emprendamos la aventura de escribir, editar y publicar este libro. Es decir, sin aventureros que hubieran trazado ya algunos caminos que les han llevado hasta la meta, este libro seguramente no existiría... a todos ellos, gracias. Y de la misma manera que hemos empezado con un poema, queremos cerrar esta introducción con otro texto, igualmente inspirador. Este fue pronunciado por Christiaan Barnard, cardiólogo surafricano que realizó el primer trasplante de corazón: Si piensas que estás vencido, vencido estás. Si piensas que no te atreves, no te atreverás. Si piensas que te gustaría ganar, pero que no puedes, ya has perdido. Porque en el mundo, te vas a encontrar que el éxito empieza con la voluntad humana. Todo es un estado mental. Tienes que pensar bien para elevarte. Tienes que estar seguro de ti mismo antes de intentar ganar un premio. La batalla de la vida no la gana siempre la persona más fuerte o la más ligera, Porque tarde o temprano, el que gana es aquel que cree que puede hacerlo. Christiaan Barnard
Ferran Peiró i Puig (Terrassa, 1972) es licenciado en Economía General (UAB). Trabajó en el sector textil e informático antes de recalar en la administración pública. Actualmente trabaja como técnico del Área de Desarrollo Económico de la Diputación de Barcelona, dando apoyo a los técnicos que asesoran directamente a emprendedores.
Guillem Perdrix Vidal (Barcelona, 1978) es licenciado en Administración y Dirección de Empresas (UAB). Ha asesorado directamente a emprendedores y ha desarrollado herramientas y metodología para el emprendimiento en la consultora Daleph. Actualmente es Director General de la Federación de Cooperativas de Trabajo Asociado y profesor asociado del Departamento de Economía de la Empresa de la UAB, donde imparte Creación de Empresas y Dirección Estratégica.
Albert Torruella Torres (Barcelona, 1981) es licenciado en Administración y Dirección de Empresas (UB) y máster en Dirección Económico-Financiera (UOC). Asesora directamente a emprendedores como técnico en la administración pública y es profesor asociado del Departamento de Economía y Organización de Empresas de la UB, donde imparte Dirección Estratégica de la Empresa.
«El país necesita más emprendedores y más empresas con voluntad de crecimiento. Por eso, un libro que fomenta el emprendimiento siempre es una buena noticia. En este caso, además se trata de un texto que destaca por un estilo que hace muy amena la lectura y unos planteamientos muy sugerentes, así como unos ejemplos muy reales. En definitiva, un trabajo excelente». Oriol Amat, Catedrático de Empresa de la UPF y Consejero de la Comisión Nacional del Mercado de Valores