Argumento de La Constitución de Weimar
La Constitución alemana de 11 de agosto de 1919, más conocida como Constitución de Weimar, de cuya aprobación se cumplen noventa años, encierra una enorme paradoja ya que si de una parte fracasó en su propio país como consecuencia de la incapacidad de las fuerzas sociales para hacer de sus instituciones y normas centro de referencia de la vida política, de otra ha venido actuando como modelo a imitar en el «segundo momento» del constitucionalismo democrático, identificado con los valores y principios del Estado social de Derecho. Ello explica que sin bien el régimen de Weimar terminó claudicando con escasa gloria en 1933, ante la presión de los enemigos nacionalsocialistas concertados en enrevesada coincidencia de intereses con sus adversarios comunistas, su concreta forma de entender la política y de escribir la Constitución haya llegado a convertirse en paradigma del constitucionalismo democrático, vigente hasta la crisis de la concepción moderna de la política a que hoy asistimos. Con el doble objetivo de conmemorar Weimar, y poner a disposición del lector de habla castellana un texto que anticipa las instituciones y soluciones técnicas a los problemas jurídicos de lo que hasta ahora era constitucionalismo democrático, Tecnos publica este libro en su colección «Clásicos del Pensamiento» en la que también han aparecido las obras de los grandes autores que vivieron a la sombra de Weimar, Carl Schmitt y Hans Kelsen.0Nota editorial.. I. Una valoración de conjunto sobre la experiencia de la Constitución de Weimar, por Costantino Mortati (1946).. II. El proceso de elaboración de la Constitución de Weimar, por Walter Jellinek (1930).. III. Texto de la Constitución alemana de agosto de 1919 y comentario sistemático a sus preceptos, por Ottmar Bühler (1922, 3.ª ed., 1929).