La casa de los celos es una comedia de circunstancias con carácter caballeresco. Se estructura en tres actos, dentro de los cuales se funden el motivo carolingio con la leyenda de Bernardo del Carpio. Todo se configura en torno a una sucesión de grotescas escenas, como, por ejemplo, combates, encantamientos, cuchilladas, y otras serie de acciones que se exponen sobre un fondo de imaginación ariostesca sin ironía ni rigor.