La asociación de los judíos con el Estado de Israel es fácil, casi automática. ?Estado judío? y ?Estado hebreo? se han convertido en términos de uso corriente. Sin embargo, entre los partidarios incondicionales de Israel hay menos judíos que cristianos. Esta obra explica esta aparente paradoja y evidencia la oposición al sionismo articulado en nombre de la tradición judía. Esta oposición mina la legitimidad propiamente judía del Estado de Israel y representa, según el experto israelí Joseph Hodara (profesor de Sociología, Universidad de Bar-llan, Israel), ?una amenaza más importante que la hostilidad árabe y palestina?. Las raíces de la oposición judía a la existencia misma al Estado de Israel es un fenómeno a menudo ocultado, incluso censurado, y provoca tanto indignación como curiosidad.