Año 425 después de Cristo. Atila se acerca a Roma. El Papa León sabe que si «el azote de Dios» no la conquista, será otro quien lo haga antes o después. Así que encomienda a Ioannes, un caballero que parece estar bendecido con la inmortalidad, sacar de la urbe un misterioso cofre y huir hasta una nación que está emergiendo en ese momento, llamada a convertirse en la poderosa Serenísima República de Venecia.
Carnaval de Venecia, en nuestros días. El Papa Pedro II es arrojado desde el Campanile por un encapuchado. La ciudad queda sitiada hasta que se resuelva el crimen, y atrapa en su red de canales al hijo de un millonario inglés, a una joven arqueóloga española y a toda una panoplia de personajes que ignoran hasta qué punto la historia en la que participan puede cambiar el mundo.
Ioannes es una novela vertiginosa. La intriga alcanza hasta la cúpula de la Iglesia y se sumerge en el túnel del tiempo. Intereses políticos y espirituales entran en conflicto en una Venecia retratada por Alfonso del Río con precisión histórica y rasgos legendarios. En la lid entre conspiradores implacables y hombres y mujeres dispuestos a la victoria del bien, el lector solo al final encontrará respiro.