Se presentan en este libro diversos estudios, realizados a lo largo del tiempo, que pueden dar al lector una imagen de la vida de la Iglesia en América Latina, durante los siglos XVI a XVIII. En ellos se percibe el caminar esforzado, entre logros y lágrimas, del vivir cristiano en un mundo colonial. La parte I se dedica a la primera evangelización y eclesialización ameri-canas. La parte II se centra en el siglo XVIII. El nervio principal de estos estudios son los concilios considerados regalistas, convocados por Carlos III de España por el «Tomo regio» (Real Decreto del 21 de julio de 1769), y que se celebraron en México (1771), Manila (1771), Lima (1771-1772), Charcas (1774-1778) y Santa Fé de Bogotá (1774). Fueron promovidos por el monarca para lograr la colaboración de los prelados americanos al proyecto de reforma del reino.