Las comedias de capa y espada son la rama del teatro de Calderón que más se asemeja al de Lope. Calderón simplificó las tramas de sus comedias y les dio mayor vigor narrativa suprimiendo las escenas públicas que tanto gustaban a Lope y a su generación. El eje de la acción suele ser el amor, los celos y el honor. Los personajes se mueven de acuerdo con el decoro de su nivel social y la acción se funda en el equívoco. Es el caso de La dama duente; El astrólogo fingido; Casa con dos puertas, mala es de guardar; Hombre pobre, todo es trazas; El alcaide de sí mismo; Guárdate del agua mansa o No hay burlas con el amor.