Georgina estaba trabajando en la empresa de su hermano solo de manera temporal, pero entonces descubrió que el arrogante Matt Cervera estaba tratando de absorber el negocio y se dio cuenta de que tenía que dejar de trabajar allí inmediatamente. ¡Jamás podría estar a las órdenes de un hombre así!
Sin embargo, decirle a Matt lo que opinaba de él resultó no ser tan buena idea. Enseguida amenazó con retirar su oferta de compra, a menos que Georgie accediera a trabajar para él y a acompañarlo a su casa de España. Georgie se encontraba entre la espada y la pared, y Matt estaba empezando a atraerla irresistiblemente.