Los remedios del Dr. Bach, obtenidos a partir de flores escogidas, proporcionan una ayuda estimable para las enfermedades psicológicas, pero también para aquellas en las cuales la propia enfermedad física termina por socavar los sentimientos, ocasionando finalmente mayor daño que el puramente orgánico.
La dinamización de los remedios ha proporcionado a estas terapias una mayor eficacia, ampliando así sus enormes posibilidades curativas.