Poco después de que Manuel Altolaguirre y Concha Méndez llegaran a La Habana en abril de 1938, un grupo de artistas e intelectuales cubanos, encabezados por José Lezama Lima, promovieron una colecta para ayudar a estos dos editores a retomar la profesión que habían practicado con tanto éxito en España antes de la guerra. Un año más tarde, Manuel Altolaguirre decidió editar los cuadernos de Atentamente, de los que sólo vieron la luz dos números, que se encuentran entre los materiales más raros del impresor malagueño. Dos años después, y tras editar varios números de la revista 1916, Altolaguirre comenzó a publicar La Verónica. En sus seis números, esta diminuta revista incluyó poemas de Rafael Alberti, Jorge Guillén, Emilio Prados, Lydia Cabrera, Guillermo Owen o el propio Altolaguirre, entre muchos otros, además de reseñas, cuentos o ensayos de diversos autores. Su reducido tamaño (cada número mide apenas 8 x 13,5 cm), y su encuadernación manual son dos de sus rasgos más peculiares. Ya en México, y bajo el título de Antología de España en el Recuerdo, Altolaguirre publicó dos cuadernos cuyas páginas contienen una variada selección de obras y reflexiones de poesía lírica y dramática de autores como Alberti, Luis Cernuda, José Moreno Villa, Guillén, Antonio Machado, o Juan Ramón Jiménez.
Premio del Ministerio de Cultura al Libro Mejor Editado de 2003 en la categoría de Libros de Investigación y Erudición.
Edición facsímil de los 2 números de la revista Atentamente publicados en La Habana en 1940, los 6 de La Verónica (La Habana, 1942) y los 2 de Antología de España en el Recuerdo (México, 1946). Incluye un volumen con estudio introductorio de James Valender. Las revistas, editadas en su formato original, se entregan en un carpeta de 21,2 x 29 cm. de tapas duras.