El pasado regresa para ajustar cuentas con sangre y dolor.
Una serie de muertes se suceden en Zafra, todas ellas con apariencia de suicidios, y el inspector jefe Solbes y su equipo se lanzan a la caza del causante de tanto horror. Durante la investigación, tendrán que indagar, treinta años atrás, en busca de unos hechos silenciados que han desatado, en el presente, una vorágine de muerte que tiene sumida a la comarca en una histeria social.
Al mismo tiempo, la investigación provocará reencuentros que revivirán sentimientos interrumpidos, año y medio atrás, por el desenlace del caso del Asesino Fantasma.