William, que apareció una noche junto al palacio real de Albia, mojado y magullado, buscando cobijo, y que gracias a sus habilidades como administrador y herborista asciende rápidamente en la escala de la servidumbre hasta convertirse en chambelán del rey, pero cuya frialdad, reserva y aparente desinterés por el género femenino despiertan recelos y hacen pensar que oculta un oscuro secreto...
Margaret, la Hechicera de la Torre de Piedra, dueña de los vientos, señora y esclava de su espejo mágico de bronce, que le ha profetizado que perecerá por obra de su propia sangre, y que en consecuencia ha desatado un vendaval de calamidades sobre su hija, dada en adopción al nacer...
Y Lionel, rey de Albia, un joven rubio y apuesto cuya primera decisión como monarca, declarar la guerra a su vecino del norte a instancias de su favorito, Robert, se saldó con la derrota de su ejército y la muerte de Robert, y que ahora, indeciso y vulnerable, siente una extraña atracción por su nuevo chambelán.
Delia Sherman ha dado nueva vida a las viejas baladas inglesas en una historia de pasión y venganza, narrada con la viveza del cronista y el colorido de la gran narradora fantástica que es.