Eric Connelly es un chico inglés de trece años. Su padre, diplomático en Inglaterra, decide cambiar de aires a raíz de la trágica y extraña muerte de su esposa, por lo que solicita el traslado a la Embajada Británica en Madrid. Una vez allí, Eric tiene que adaptarse a su nueva situación, al nuevo colegio y a sus nuevos compañeros. Un día se topa con un puesto de baratijas en el Rastro, donde un vendedor le ofrece un viejo medallón roto. A partir de ese momento, se ve envuelto en un mundo de magia y todos sus problemas empiezan a mejorar ostensiblemente. Pero no todo es tan bonito como parece. Pronto descubre que nada es casual, que él mismo forma parte de una cruzada para derrotar a un antiguo y malvado mago que quiere imponer su poder sobre el mundo.