Aquí está Equador dentro de la colección Crepúsculo, un espacio que con seguridad se irá definiendo mes tras mes, y que es posible que se convierta en una colección recuperadora de la obra detenida en el tiempo, o por el tiempo. Es complejo saber qué y cómo entendía Ricard, o cuál era el susurro interno de las palabras que él decidió utilizar... Pero en este Equador lo que sí hay, en el estricto sentido de contenido, al margen de guiones y de textos, es toda una codificación. Y tanto en estas páginas como en otras historietas, deja infinidad de avisos ocultos y desvaídas figuras camufladas. En un ejemplo (uno sólo, pues podrían darse cientos), y que ocurre en la ilustración que acompaña al texto de Marta Cano (una historia conjunta de ambos, Alcom y el vuelo de las aves hacia Ubu), un niño sobre la nieve luce acaso una pelliza, y ahí, en esa capita, Ricard deja escrito, figurando letras impresas, o como collage con fragmentos del párrafo de un libro, y con lectura en espejo:... suficiente... es incluso... anárquicos... hombres...Lo mismo podemos encontrar a lo largo de su obra ya publicada, si se buscara, si hubiera tiempo...