La influencia de la Biblia no tiene que ver sólo con el pasado, sino que alcanza hasta nuestros días. Traducida a unos 2200 idiomas y dialectos, actualmente es un superventas
en términos absolutos: es el libro más vendido en el mundo.
Esta influencia se manifiesta, obviamente, en el terreno religioso, pero también se reconoce la influencia bíblica en la cultura laica: en la literatura, la música, la pintura, la escultura, la arquitectura, etc., en la vida cotidiana y, en general, en todas las facetas de nuestra civilización. Pero también debemos pensar que la Biblia ha desempeñado un papel muy importante al forjar la ética del mundo moderno. De ella nos llegan los principios de iniciativa y responsabilidad individual que caracterizan nuestra civilización, así como los principios de libertad, tolerancia y democracia, y los de exaltación de la sensibilidad social y lucha contra la miseria, la ignorancia y la degradación del hombre.
Es un hecho curioso el que hoy en día, mientras las Iglesias cristianas tradicionales parecen estar en regresión, la Biblia continúa leyéndose: esto nos lleva a pensar que esta obra contiene un germen de vida autónomo y un mensaje siempre actual, hoy y hace tres mil años.
Cada vez son más quienes leen por su cuenta la Biblia, por una necesidad de enriquecimiento cultural o, más a menudo, de búsqueda existencial. Pero no todos logran salir airosos de la empresa, en parte debido a la amplitud de la obra, indudablemente imponente, y en parte porque se trata de un texto de lectura bastante difícil.
Este libro le ayudará a no estancarse en las primeras dificultades. Aquí encontrará las informaciones básicas y un itinerario de lectura ágil que le permitirán entender el mensaje fundamental de la Biblia.