Entre sus personajes sobresale la joven Endara, quien emprende un largo trayecto desde un valle perdido hasta la Montaña Sagrada, morada de la Diosa Madre Amari. Mientras, Ihabar lucha por ser reconocido como un gran guerrero, el escéptico Garr intenta olvidar la destrucción de su ciudad y la muerte de sus habitantes, el gentil Ozen espera el momento para vengar a sus padres y el dux Baladaste hace planes para adueñarse de Tierra de Enda.
Estos y otros configuran un mosaico sorprendente de personajes, tan creíbles ayer como hoy, que se debaten entre la lealtad y la traición, la libertad, la justicia y la servidumbre, de la pluma de la reconocida escritora que, una vez más, sorprende a sus lectores con un registro diferente, innovador y, sin lugar a dudas, muy atractivo.