Las Redes y sus Grupos me tienen absorbido por completo, enamorado diría yo, pero ha llegado la hora de vivir una libertad aunque sea condicional. Llevaba tiempo cultivando en el jardín del pensamiento, y ha llegado la hora de recoger los frutos. No obstante sigo creyendo en esa llama perenne de amor a las raíces, en ese rebuscar en el rincón de la mente donde se almacenan las vivencias de la niñez y de la juventud y son muchos los recuerdos que tengo y muchos de ellos se relatan en el presente libro, otros me gustaría seguir desgranándolos para haceros partícipes de ellos, pero esto será más adelante; ahora, desde principios de febrero y durante unos días o meses, ordenaré todo el trabajo realizado en el 2014, lo clasificaré por temas (hoy aquí clasificado) y lo haré llegar a aquel que lo demande. Por eso, durante un tiempo, mi participación en los Grupos puede ser intermitente o casi nula. No dejaré de volver, nada más que pueda, a esta nueva fuente del saber que es Internet, FB especialmente: Campanario (ver y leer); Raíces de Campanario; Veo, veo, ¿Qué ves? (A ras de suelo); Ansiedad, depresión? y a mis orígenes, para seguir compartiendo mis humildes opiniones. Diego Caballero ?Levita?