Al mismo tiempo, nos invitan a replantearnos el papel que jugó el reino de Granada, último bastión del al-Andalus, en la fase final de la Reconquista, y nos ofrecen nuevas luces a episodios tradicionalmente observados desde su vertiente más oscurantista, como el tribunal de la Santa Inquisición o la expulsión de los judíos. Incluso el renacimiento humanista, prolegómeno de la Edad de Oro, adquiere mayor relieve que el tradicionalmente admitido.