En El Zafiro Negro y otros relatos se esbozan personajes y ambientes que suplantan la realidad desde diferentes perspectivas, inventando una realidad que el lector hace suya. Son relatos que tratan de preservar la felicidad universal evocando la inclusión en un mundo imaginario sin alejarse, no obstante, de lo cotidiano, y recreando situaciones de acción, humor, suspense y hasta una cierta ternura a medida que se avanza en el hilo argumental.