El Trastorno por Déficit de Atención e Hiperactividad (TDAH) es Psicopatología del Neurodesarrollo más prevalente a nivel mundial. Diagnosticada en los primeros años de vida bajo la apreciación de síntomas de inatención, hiperactividad, e impulsividad, se caracteriza principalmente por una alteración de la función ejecutiva a nivel encefálico, lo cual englobaría, entre otros aspectos, la incapacidad para aten-der adecuadamente a ciertos estímulos, planificar, reflexionar sobre las consecuencias de acciones futuras, o inhibir la conducta frente a ciertos estímulos. La significación clínica del TDAH podría traducirse en severas consecuencias tanto a corto como a largo plazo, pudiendo llegar a vincular dichos resultados al comportamiento disocial e incluso criminal, aunque lo hará en una minoría de sujetos con aquél Cuadro y comúnmente en presencia de comorbilidad diagnóstica, dotando de gran relevancia a la sintomatología externalizante. Así pues, la necesidad de indagar sobre aquellas áreas jurídico-penales y criminológicas vinculadas a la presencia de psicopatología en el sujeto conduce a realizar una búsqueda científica, exhaustiva y comparada, sobre aquel conjunto de variables que tanto a nivel intrínseco como extrínseco pudieran llegar a delimitar una trayectoria futura sustentada en la criminalidad y delincuencia. Por todo ello, se plantea la cobertura multidisciplinar del TDAH en base a distintas ramas de conocimiento, destacando fundamentalmente las que atañen al Derecho Penal, Psicología, y Criminología; esto es, a sus implicaciones jurídico-penales, psicológicas y criminológicas