Argumento de El Tiempo Irreverente
En El tiempo irreverente, renace con fuerza todo el universo que envuelve al autor y ese lirismo fino que recuerda en algunos momentos a Bécquer y a Machado. Un mundo interior en donde el autor se desnuda y ofrece su versión más intimista y descarnada. Un estado hipnótico de ensoñación muy particular, según el autor, origina todo su mundo creativo. En este poemario, el autor se decanta por el verso libre, sin olvidarse del verso rimado, y prueba de ello, son poemas de gran belleza: Me convierto, Oh viento, Trigos sembrados. Miguel Ángel, se encuentra cómodo haciendo de puente entre la poesía clásica y la literatura contemporánea, y en palabras suyas, siente una predilección especial por los autores clásicos de donde ha bebido constantemente de sus fuentes. Una vez más, sorprende su comunión con el mundo de los marginados y en ese contexto, su poesía encuentra el camino más sincero; también sucede, cuando escribe sobre temática de índole metafísica con un sentimiento trágico de la existencia. En el poema La vida, escribe: Que importa ese egoísmo desacerbado que olvida a los pobres, a los afligidos, a los vulnerables, que son como castillos desplomándose en su sangre, como si un cuchillo helado de pronto les traspasara su vientre.0