¿Se puede comprender a un autor sin conocer la época histórica que vivió? ¿No somos todos hijos de nuestro tiempo? Sabido es que William Shakespeare (Stratford-upon-Avon, Inglaterra, 1564-1616) es una ineludible referencia cultural y un genial dramaturgo. Un escritor que se disfruta por su sensibilidad e ingenio, por su capacidad para comprender y describir el alma humana, por su talento a la hora de afrontar los dramas, por su sobriedad ante los dilemas morales o por su dominio de la escenografía y los recursos teatrales. Pero Shakespeare, como cualquier otro escritor, es también su territorio personal, político, social y familiar. La época histórica que le toco vivir: sus contemporáneos.
Este libro de Frank Kermode -un reconocido especialista en Shakespeare y sus circunstancias históricas- permite ese recorrido vital por una época convulsa, a caballo entre el siglo XVI y los albores del XVII, dominada por la dinastía Tudor. Un período que Shakespeare vivió y describió en sus escenas, atravesado por luchas dinásticas, conspiraciones nobiliarias, la reforma protestante o los problemas planteados por la descendencia en la sucesión real.
Inteligente y ameno, este paseo por las circunstancias físicas y emocionales de Shakespeare, por el mundo que conoció en primera persona, ofrece al lector la posibilidad de situar al autor de piezas maestras como Hamlet, Macbeth o El mercader de Venecia en el contexto vital de la realidad de su tiempo.