En mitad de la amable rutina cotidiana trabajo, fútbol y tele , la aparición de un cadáver desangrado con dos marcas de colmillo en el cuello no puede por menos que llamar la atención. Sin embargo, nadie quiere creer lo que resulta evidente; solo un investigador privado y un policía veterano que creía estar de vuelta de todo deciden seguir las pistas que se esconden tras cada crimen sucesivo.