La diversidad de perspectivas con que puede contemplarse el suelo, no deben ocultar su dimensión principal y fundamental, es decir, su configuración como elemento del ambiente. No resulta posible explicar el funcionamiento del medio ambiente sin consideraLa diversidad de perspectivas con que puede contemplarse el suelo, no deben ocultar su dimensión principal y fundamental, es decir, su configuración como elemento del ambiente. No resulta posible explicar el funcionamiento del medio ambiente sin considerar la participación del suelo, como tampoco resulta posible organizar su protección al margen de la cabal consideración y tratamiento de tal elemento en el complejo ambiental.