?La dicha nos invadió la mañana del 23 de mayo de 2012 cuando fuimos testigos de la erudición ancestral reservada por siglos. Gracias a las aportaciones de tantos investigadores e informantes que nos antecedieron y a los colegas que nos compartieron su conocimiento, ese día pudimos advertir impresionados, desde la pirámide de El Castillo, cómo el Sol, durante su día de paso cenital, se levantaba perfectamente alineado sobre el vértice de la pirámide en dirección al Templo de las Mesas.?