Sin embargo, cuando los altavoces de la estación anuncian la inminente salida del tren, Molly, por primera vez en su vida, toma una decisión atrevida y emprende el viaje a París. No tiene más planes que visitar museos y pasear en solitario por los famosos bulevares parisinos. Pero en su primera noche conoce a la impulsiva Alicia y el fin de semana en solitario se transforma en una aventura de ritmo frenético. Clubes a orillas del Sena, carreras nocturnas en moto, misteriosos y seductores artistas franceses... y también la aparición de la persona que menos desea ver en el mundo, su antiguo jefe.
En un fin de semana, Molly descubre un mundo excitante y nuevo y, al mismo tiempo, una parte de sí misma asombrosamente desconocida. Nunca imaginó que subirse a ese tren iba a cambiarla para siempre.