El poder de la Reina. retrata la vida de Bernardo: la perdida de su mujer y el drama de un hijo sumido en la droga, lo llevan a la muerte simbólica del hombre que había sido, para emprender el camino hacía la conquista de sí mismo a través del dolor, la perdida de los valores establecidos y la posterior curación cuando encuentra el verdadero amor. Un amor sin exigencias, sin prejuicios, que part
e de la aceptación de las imperfecciones mutuas a pesar de la diferencia de edad, y los lleva a superar la desesperanza y la mediocridad.
Con un lenguaje que desafía lo políticamente correcto: real, cotidiano, sin artificios. Consigue zambullirnos en la cruda realidad del mundo de la droga y el fiel reflejo de cómo la heroína convierte a los personajes en fantasmas de ellos mismos. Los héroes ceden el paso a las personas, los sentimientos más elevados dan paso a la vida real.
El autor nos descubre los caminos de la heroína, el sexo, los dramas de la infancia, el asesinato, la muerte, el poder redentor del amor, y todo ello, sin perder el control de un vertiginoso hilo argumental que nos empuja a seguir leyendo.