El autor nos ofrece por primera vez el sumario judicial que involucró en su día al rey Alfonso XIII y a destacados miembros de su camarilla, como el duque de Alba y el marqués de Villabrágima, en delitos de estafa, falsedad, asociación ilícita y malversación.
Escrito como una novela pero con el rigor de un tratado, Zavala invita al lector a dar un largo paseo por las inversiones de Alfonso XIII en la industria cinematográfica, revelando que el conde de Romanones llevaba a su señor películas pornográficas escondidas en una maleta, cuya producción encargaba a la Royal Films de Barcelona.
Pero no sólo los vicios inconfesables del monarca salen a relucir en estas páginas; también la herencia y el cuaderno particional de Alfonso XIII, nunca antes publicados. Zavala acaba con el mito del «rey pobre» y exiliado, pues demuestra con documentos que el monarca llegó a manejar una fortuna familiar de casi 70 millones de pesetas de la época, equivalentes hoy a más de 144 millones de euros.
Comprobaremos que don Juan de Borbón resultó ser el mayor beneficiado por la herencia, cuyos bienes inmobiliarios liquidó a la muerte de Franco, y descubriremos detalles insólitos de las tres mayores pasiones borbónicas: la caza, los automóviles y los yates.