Esta antología recoge cinco piezas maestras que se encuentran entre lo mejor de su producción. El autor irlandés fue un consumado autor de relatos cortos de tema sobrenatural, y en ellos dejó establecidas ciertas pautas que dominarían la narrativa victoriana: recreación de atmósferas, escenarios cotidianos, elementos folclóricos y legendarios, cierta ambigüedad moral.