Fechada en 1923, en la ciudad de Rotterdam, es la segunda novela de la serie «El mar», y una de las obras fundamentales de don Pío, por cuanto nos introduce de lleno en la rica complejidad de su mundo literario -poblado por infinidad de tipos raros y curiosos, siempre insatisfechos, siempre cautivantes para el lector-. A la compleja filosofía que suelen destilar sus narraciones -una filosofía entre el pesimismo melancólico y un vitalismo de corte nietzscheano- se suma en este caso un hermoso homenaje al mundo clásico grecorromano que antaño pobló las riberas del Mare Nostrum .
En el agitado Nápoles de los años veinte, el capitán Andía conoce a la ya anciana marquesa de Roccanera,una dama napolitana cuyo pasado parece ocultar una serie de dolorosos recuerdos; Andía descubre asimismo la autobiografía manuscrita del marino vasco Juan Galardi, quien, tras una serie de dolorosas decepciones sentimentales, empieza a trabajar como administrador de una finca de la marquesa Roccanera, un lugar cuyos laberínticos recovecos propician tanto los amores furtivos como las historias de aparecidos y fantasmas. Pero Galardi no tardará en verse arrastrado nuevamente al torbellino de la acción: embarcado en una alborotada singladura por el Mediterráneo, deberá afrontar la más peligrosa de sus aventuras, repleta de lances amorosos y arriesgadas peripecias.