En "El juego del amor y del azar", Marivaux retorna al tradicional juego del doble y del travestimiento de personajes (incluidos los amos) con una trama centrada en una sola acción: el encuentro de los protagonistas y la evolución de sus relaciones amorosas. Pero, en "El juego del amor y del azar", los padres han asumido la lección de los escenarios y los avances de una sociedad que se mueve hacia la Ilustración, y dejan la última palabra de tan importante decisión en manos de los hijos. El tema de los orígenes centra la trama de las otras tres: la desigualdad de la organización social, en "La isla de los esclavos", la forma y el momento en que los sentimientos amorosos nacen y "sorprenden", en "La disputa", y el sometimiento de la mujer en sociedad o dentro del matrimonio, en "La colonia".