Don Félix de Montemar es un apuesto y valiente caballero, al que le gusta enamorar a las mujeres, y luego dejarlas. Eso es lo que hizo con doña Elvira que, tras ser abandonada, muere de amor. Años después, don Diego, hermano de doña Elvira, desafía en duelo a don Félix para vengar a su hermana, y acaba muerto. Montemar provoca la cólera divina y en su locura ve a una mujer con un vestido blanco a la que decide seguir. A don Félix se le aparecen horribles escenas y la figura le tiende la mano para salvarle, y su cara resulta ser la calavera de doña Elvira. Se abrazan y descansarán unidos para toda la eternidad.