Esta obra es una novela en primera persona, a manera de crónica. El narrador es un antiguo fugitivo que escapó de la cárcel y buscó una nueva identidad: se hace cura para alejarse de la policía y poder llevar el resto de su vida con calma. Sin embargo, su tranquilidad se ve interrumpida por extraños sucesos que sin querer, lo convierten en testigo de dos crímenes y al mismo tiempo, punto de mira de la policía de París. De esta forma se ve obligado a actuar como un improvisado detective quien, junto ato a su novia, debe resolver el caso de un asesinato en el que se usó un misterioso veneno que nadie logra identificar.Con un estilo desenfadado, que recuerda constantemente el verdadero temperamento del cura fugitivo, el autor nos lleva a través de todasas sus aventuras, manteniendo el suspense de forma magistral. Así vamos desvelando el asesinato y encontramos cuál es el verdadero responsable.Una historia que resulta de todo menos convencional, empezando por lo atípico de su protagonista, un cura bastantante raro, que ha sido acusado de asesinato en su juventud; y más tarde en su madurez, puede incluso tener novia.Esta obra es, en definitiva, una agradable novela detectivesca, en la que también tiene cabida el humor.