Los cuentos eróticos tienen siempre una raíz común, normalmente griega, son adaptados posteriormente a las distintas culturas y enseñanzas y que contribuyeron, que duda cabe, a través de cuentistas como Chaucer o Boccaccio al nacimiento de la novela moderna.
Infidelidades, amantes, maldades, vicios, amores, astucia y violencia. Historias populares, universales y perennes traducidas por el premio de las Letras Rodríguez Adrados e ilustradas por Antonio Mingote.