En ciencias, como en artes, y en muchos otros aspectos de la vida, existen personas injustamente olvidadas. És-te es el caso del médico grancanario, nacido en Santa María de Guía, Miguel Gordillo y Almeida (1824-1898), que en Cuba desarrolló una amplia labor como clínico (destacando especialmente sus investigaciones sobre la fiebre amarilla y el tétanos), como estudioso de la antropología física de los antiguos canarios y como autor de una Geografía en verso sobre España y Cuba. Asimismo, fue uno de los fundadores de la Asociación Canaria de La Habana y fue redactor de la revista El Mencey.