Argumento de El Burlador de Sevilla. Marta la Piadosa
La edición conjunta de estas dos obras arranca no sólo del hecho de ofrecer dos comedias cuyo contraste expone la varia riqueza de nuestro teatro clásico, sino porque manifiestan dos cursos escénicos de contrastada representación. En la primera, Tirso de Molina ofrece una posición masculina ya mítica, que en Don Juan se desarrolla como un negativo símbolo viril al que sirven las debilidades femeninas que los sostienen, en la segunda obra muestra el autor su frecuente predilección por el carácter femenino, como protagonista que positivamente exterioriza su condición. El profesor Antonio Prieto, catedrático de la Universidad Complutense de Madrid, subraya ese contraste, tan grande dentro del contrastar barroco, que si Marta es, por su protagonista, una admirable comedia típicamente tirsiana, El burlador permitió entenderse, por cierta crítica, como obra ajena a Tirso.0