Años más tarde, el algoritmo de Mo fue sometido a una durísima prueba cuando su hijo, Ali, murió de manera repentina. Él y su familia pusieron en práctica la ecuación y pudieron salir de la desesperación y recuperase de la tragedia. Después de vivir esta experiencia, Gawdat decidió que compartiría su algoritmo con el mundo y ayudaría al mayor número de personas posible a ser más feliz.
En El algoritmo de la felicidad, el autor nos explica las razones subyacentes al sufrimiento y nos enseña, paso a paso, cómo despejar la fórmula para lograr una felicidad para toda la vida enseñándonos a disipar las ilusiones que nublan nuestro pensamiento.