La familia constituye el compromiso social más firme de confianza, protección y ayuda mutua entre un grupo de personas y, sin embargo, también es un escenario pródigo de contrastes y contradicciones. Es el espacio donde se desarrollan las relaciones más seguras y duraderas Pero, también, a veces, es el lugar donde más vivamente se manifiestan las hostilidades, rivalidades y los más amargos conflictos entre hombres, mujeres, ancianos y niños.