La fiscalidad de la discapacidad es fruto de un proceso dinámico, de creciente relevancia en el Derecho Tributario, en el que ha ido introduciéndose de forma paulatina y con resultados variables, especialmente perceptibles en el Impuesto de la Renta. Pero no ha terminado de ser un modelo unitario y acabado, por lo que es necesario seguir promoviendo su desarrollo y perfeccionamiento.
Gracias a este informe disponemos de una idea clara y precisa de las líneas de actuación y mejora que se pueden plantear a propósito de la discapacidad en cada una de las figuras de nuestro sistema jurídico-tributario, sean del Estado, de las Comunidades Autónomas o de las Haciendas Locales.
Es cierto que los resultados obtenidos en la última legislatura no han sido especialmente brillantes, debido al pésimo contexto económico, pero ello no debe ser causa de desaliento. Los poderes públicos son conscientes de la necesidad de avanzar en este campo y el trabajo se ha hecho. Solo falta encontrar la coyuntura adecuada. Por tanto, las perspectivas de futuro están abiertas y son esperanzadoras por la razón de fondo que las asiste.
El informe resume los temas debatidos en el seno de la Subcomisión citada, que se proyectan sobre la totalidad del sistema tributario, incorporando los documentos de trabajo que sirvieron de soporte a los debates. Se ha dedicado especial atención a la fiscalidad del patrimonio protegido de las personas con discapacidad, por su escasa eficacia, y a los beneficios fiscales ligados al empleo de las personas con discapacidad, objetivo siempre esencial pero coyunturalmente todavía más prioritario.