Bien profundo, dentro del corazón de toda alma, se encuentra el deseo de experimentar y comunicar directamente con el Espíritu. La presencia divina no es propiedad exclusiva de grandes santos, sabios u hombres sagrados. Todo el mundo merece tener las bendiciones del Espíritu.
En este libro profundo, práctico y transformativo aprenderás técnicas comprobadas para abrir tu corazón, mente y espíritu a las riquezas del contacto divino interno. Abrirás tus canales a lo divino y dará comienzo el flujo de la guía interna, el amor, la sanación, la sabiduría y la inspiración, procedentes del centro de tu ser.