¿Cómo que estoy detenida? Sarah Connelly, madre adoptiva de un bebé de cuatro meses, no podía creer que el hombre del que había estado tan enamorada estuviese metiéndola en un calabozo. El comisario Patrick Finnegan prometía sacarla de aquel aprieto, pero su confianza en él había desaparecido cuatro años atrás. Aun así, estar con aquel hombre tan imponente hacía que su pulso se acelerase... Finn sabía de corazón que Sarah no había asesinado a Teresa Donovan, pero no podía pasar por alto las abrumadoras pruebas en su contra, ni el deseo que sentía por ella. De modo que tenía dos tareas urgentes: encontrar al verdadero asesino y convencer a la mujer de su vida para que le diese una segunda oportunidad.