Argumento de Desenterrando Tesoros en el S.xvi.compañias de Huaca y Part.
La costa norte del Perú presentaba en los primeros años de la conquista, y aún hoy, una gran cantidad de templos, sepulturas y estructuras, denominadas comúnmente huacas, reflejo de las culturas indígenas que habían habitado la región desde hacía siglos. Si bien durante los primeros años de conquista se produjo un saqueo y expolio de las ciudades, templos y sepulturas indígenas, avanzado el siglo XVI esta explotación de huacas o sepulturas indígenas se convirtió en algo organizado y sistemático. La Corona se ocupó de regular esta extracción de tesoros, haciendo del proceso algo muy vigilado donde se seguían una serie de pasos: denuncia y registro de la huaca, licencia para "covar" la estructura, nombramiento de un veedor Real, pago de los impuestos a la Corona, etc.
La estructura de los negocios de huacas siguió el modelo establecido para la mayor parte de las empresas y negocios comerciales del momento, la creación de sociedades o compañías, en las que los socios se repartían los costes de la excavación. Al analizar la composición social de estas "compañías de huaca" se observa una participación significativa de población indígena, fundamentalmente de curacas y señores "principales", que formaron parte de las compañías de huacas junto a otros socios españoles, aportando mano de obra y capital suficiente para llevarlas a cabo. El principal objetivo de esta investigación ha sido analizar las consecuencias que esta destrucción organizada y sistemática de las llamadas huacas, enterramientos y sepulturas de la costa norte peruana, tuvo durante los primeros setenta años de conquista para la población indígena que habitaba la región, atendiendo para ello al delicado papel desempeñado por los curacas indígenas en ellas, dado su carácter de intermediarios entre las autoridades hispanas y su comunidad, y entre esta última y el "mundo de los ancestros".0