Un paseo simple por Washington, D.C. fue el inicio de un recorrido profundo de descubrimiento personal y de renovación para Newt Gingrich, uno de los políticos y comentadores más influyentes de Estados Unidos. Un día mientras leía los archivos nacionales, las palabras inmortales de la Declaración de Independencia: "Nuestro Creador nos ha dotado de ciertos derechos inalienables", saltaron de la página y penetraron en su corazón presentándole la clara verdad de que desde el inicio de la historia de ese país, el autor de la libertad no era el estado o los Padres de la patria. Nuestros derechos y libertades básicas humanas eran y todavía son "dadas por el Creador". Gingrich suena la alarma para que reconozcamos que la vida, la libertad y la búsqueda de la felicidad que valoramos tanto son conceptos inseparables de un sincero y humilde reconocimiento de que estos regalos son sólo dados por el Creador. El libro también incluye como material extra un "recorrido a pie" de Washington, D.C.