Argumento de De la Llama en que Arde
El nombre de María Victoria Atencia dejó de ser un secreto entre iniciados cuando -rebasado el cerco de muy exclusivas entregas- su poesía alcanzó un cálido reconocimiento unánime. Desde entonces se ha ido coincidiendo en el motivo de aquella sorpresa: María Victoria, despegada de la generación que le corresponde - la << segunda de posguerra >> , la de los 50- e incluso ajena a ella, como puede verse en estudios y antologías, tenía que ser -por su sensibilidad y su escritura- un hallazgo y descubrimiento de la generación << novísima >> . La colección Visor de poesía conoce bien la obra de María Victoria desde que, en 1984, dio en Ex libris su recapitulación y su progreso. Ahora, con De la llama en que arde, vemos cómo María Victoria se adentra en la tersura y sosiego de su propia voz hasta un límite que, de algún modo, va a exigirle un giro definitivo.0