Estos cuentos han sido escritos para niños a partir de los tres años de edad. Mi intención, en principio, es que se diviertan leyendo, pero además, cada uno de ellos lleva al final una moraleja de carácter didáctico, que debería ser explicada por sus padres para completar la comprensión del cuento. Esta moraleja, va en consonancia con el desarrollo y la temática de cada cuento y lo que pretendo con ella es recordar a los pequeños, algunos valores ya olvidados en nuestra sociedad actual. Espero que os gusten y que disfrutéis leyéndolos, tanto como yo he disfrutado al escribirlos.