En primer lugar a causa de su antigüedad: fue compuesto probablemente en el 550-552 de la Héjira, y es uno de los pocos que consiguió sobrevivir en una época enormente turbulenta.
Además, proporciona considerable información histórica y biográfica que no es normal encontrar en otras obras.
Por otra parte, el estilo de su prosa es un modelo a seguir: desde este punto de vista pocos prosistas persas pueden rivalizar con Nizami Aruzi.
Muy pronto, la disposición del contenido contribuyó a que la obra fuera más conocida por el subtítulo, Los cuatro discursos, que por el título original.
NIZAMI ARUZI -"el especialista en prosodia"- fue un poeta cortesano que trabajó durante más de cuarenta años al servicio de los príncipes de Gûr.
Sus escritos en verso no han llegado hasta nosotros, pero sí conservamos esta joya de la prosa persa clásica, en la que el autor nos informa del estado en el que se encontraban la medicina, astrología y la poesía de su tiempo.
Es, además, el único testimonio directo que ha llegado hasta nosotros de un contemporáneo que conoció y trató a Omar Kayyam.