La Fiera Literaria fue un panfleto de denuncia de los excesos en el mundo literario (amaño de premios, trapicheo con subvenciones, falsos prestigios creados al amparo del marketing, turbias prácticas entre editoriales y distribuidoras) que durante varios años obró de aldabonazo en las conciencias literarias de este país y causó mucho sobresalto a autores consagrados en la listas de ventas. En el seno de este panfleto, y la manera de ?método científico?, surgió la que se denominó ?crítica acompasada?. Como su nombre indica, se trata de una crítica que se va haciendo ?al compás? de la lectura de la obra que se estudia, indicando con precisión (página, párrafo e incluso línea) el punto en que se produce el atentado lingüístico, el latigazo a la lógica, la gansada sublime? Obviamente, y por su propia naturaleza, la ?crítica acompasada? se refiere a obras que destacan por su calidad literaria (por su nula calidad literaria más bien), aunque conforme el método se vaya afianzando es posible que pueda ser empleado para analizar obras meritorias. Entre los distintos preceptos que sigue la ?crítica acompasada? cabría destacar aquí tres. En primer lugar, su vocación de denuncia de los falsos prestigios y los autores sobrevalorados por cuestiones comerciales. Quiere esto decir que nunca se emplearán los cultivadores de este método contra quien empieza a escribir o contra quien mal que bien, en el esfuerzo y en la medida de sus posibilidades, va despachando sus obras, sean estas mejores o peores. El segundo precepto es que se trata de una crítica ?literaria?, ceñida a la novela y que nunca entrará a valorar aspectos personales del autor. Mucho menos caerá en el insulto. Y en tercer lugar, su compromiso con la ironía y el humor. Clandestino Menéndez, uno de los principales cultivadores de este método, nos trae aquí su segundo "Cuaderno Crítico", tras el éxito del primero. En este segundo cuaderno, como verá al lector, la crítica acompasada ha traspasado fronteras?