Este libro pretende exponer las etapas de esta lucha y de esta polémica sobre los oráculos paganos en los primeros textos cristianos. Se traducen y analizan los ciento veinticuatro oráculos griegos contenidos en estas fuentes, desde el Pastor de Hermas, una de las últimas manifestaciones de la literatura apostólica, hasta Teodoreto de Ciro y Cirilo de Alejandría, en el siglo V, pasando por diferentes autores patrísticos, como Taciano, Orígenes, Clemente, Dídimo el Ciego, Gregorio de Nacianzo, Gregorio de Nisa, Filostorgio, Juan Crisóstomo, Sócrates de Constantinopla, y, en especial, Eusebio de Cesarea, entre otros.