«Hubo un momento nos cuenta Jesús Marchamalo en su nuevo libro, hace años, en que todos queríamos ser Cortázar. Nunca tuve ocasión de encontrarme con Julio Cortázar en persona, nunca coin-cidimos en ningún acto, nunca fui a que me firmara alguno de sus libros, ni lo visité en ninguna de sus casas parisinas, ni siquiera me crucé con él en el metro. Así que guardo de él una imagen un tanto legendaria, soñada o ideada, de historias que me han ido contando, o que he leído.»
El autor de Tocar los libros (un libro que se ha convertido ya en un pequeño objeto de culto para los amantes de los libros) se adentra en Cortázar y los libros en el mundo más íntimo y curioso de Julio Cortázar, el de su biblioteca personal. El rastro de sus libros subrayados, con esquinas dobladas, apostillas y papeles -hojas de calendario, recortes de periódico, un pedazo de cartulina garabateado- dibuja un retrato imaginario sobre el autor de Rayuela que hará las delicias de bibliófilos y bibliópatas.
Marchamalo subraya: «He eludido conscientemente hablar con personas que pudieron conocerlo o tratarlo muchos de ellos escritores que aparecen mencionados en las siguientes páginas y que podrían haber aportado un testimonio fidedigno del Cortázar lector. Pero me resultó sugestiva la idea de que este libro llegue a tener algo de hallazgo fortuito, de azaroso descubrimiento: un Cortázar inédito convertido, a través de sus lecturas, en territorio definitivamente fabulado».
Cortázar y los libros hará las delicias de todos los amantes de la lectura y del libro, editores, bibliotecarios, libreros o lectores en general, bien sean bibliófilos bien bibliópatas. Un homenaje desenfadado y muy personal a las bibliotecas personales, a las manías de uno de los iconos de la literatura hispanoamericana, y al mundo de los libros. Este libro explora el territorio de las bibliotecas personales y nos redescubre el particular arte de la dedicatoria, tras el que late, más que el puro coleccionismo, una intensa pasión por la belleza y lo irrepetible de los libros en papel.